Este 7 de febrero los ecuatorianos elegirán presidente, vicepresidente en una primera vuelta y, a la par, renovarán el parlamento. Los obispos han pedido al pueblo “¡Qué el Ecuador no deje de ser nunca una tierra de hermanos!”
Los prelados han recordado que “es la ocasión de que volvamos nuestros ojos al Corazón de Jesús, a quién fuimos consagrados como nación. En estos momentos cruciales de la Patria la luz de la fe puede y debe renovar las conciencias y fortalecer la responsabilidad de los electores y de los candidatos”.
Promover el diálogo
Días previos desde la presidencia del episcopado promovieron una jornada de oración y ayuno con “familias, grupos apostólicos, parroquias, diócesis” por el nuevo destino de Ecuador tras estas elecciones.
Además han invitado a promover “la paz, del diálogo, de la fraternidad” en una sociedad polarizada, por tanto “no nos podemos lavar las manos. Con la distancia, con la prescindencia, con el menosprecio. O somos hermanos —permítanme—, o se viene todo abajo”, han dicho tomando las palabras del papa Francisco por el Día Internacional de la Fraternidad Humana.
“Es el momento de la escucha. Es el momento de la aceptación sincera. Es el momento de la certeza que un mundo sin hermanos es un mundo de enemigos”, han acotado.
Foto: El Universo